Segundo encuentro de obispos chilenos con el Papa Francisco
Los 34 obispos chilenos llamados por el papa Francisco al Vaticano por su gestión poco transparente en los casos de abusos a menores se reunieron este miércoles de nuevo con el pontífice y lo volverán hacer mañana.
El encuentro tuvo lugar a las 18:00 hora local (mediodía de Chile), una cita a la que partieron en autobús con 45 minutos de antelación desde la residencia vaticana «Domus Romana Sacerdotalis», donde se alojan.
Las reuniones de los obispos chilenos con el pontífice comenzaron este martes y terminarán mañana, cuando se celebrarán otras dos, una por la mañana y otra por la tarde.
En el encuentro de este martes el papa argentino les entregó a cada uno un texto con los temas de meditación y les instó, desde dicho momento y hasta la próxima reunión, «a meditar y orar».
El segundo encuentro, de este día miércoles, fue un poco más extenso que el del día anterior.
«Tuvimos un encuentro muy interesante y seguimos en este diálogo de discernimiento con el Santo Padre, que ha sido muy fecundo», dijo el Obispo Auxiliar de Santiago, Fernando Ramos.
«El Papa nos escuchó, fue muy interesante. Muy bonito, muy interesante, muy profundo. Ustedes saben que tenemos una cierta confidencialidad, yo les cuento que efectivamente tuvimos un diálogo fecundo que se enmarca en este proceso de discernimiento», agregó.
Posible reforma a la Iglesia chilena
Vaticanistas y expertos en el tema se han referido a la reunión y aseguran que se está planteando una posible reforma a la Iglesia chilena.
Respecto a la cita, el portavoz de Voces Católicas, Sergio Carrasco, explicó que «el Papa busca que los obispos de Chile piensen en cómo reformar la Iglesia de mejor manera, y para eso los pone en un estado de oración. Porque para la Iglesia, la oración es un instrumento de decisión».
Y agregó que «lo interesante de todo esto es que el discernimiento se basa en un hecho concreto, por lo que uno podría suponer y esperar que el Papa ya les entregó sus conclusiones y les pide que reflexionen sobre ellas para lograr una reforma eclesiásticamente cultural».
Francisco convocó a los obispos después de haber constatado que fue mal informado respecto al obispo de la diócesis de Osorno, Juan Barros, a quien acusan de que sabía que el cura Fernando Karadima abusó durante años de menores.